Contar con visión, te pone en condición.
"Bienaventurados los que saben a donde van, porque son los únicos que sabrán, cuando han llegado" Miguel Ángel Cornejo (Autor mexicano con más de 40 publicaciones en materia de la cultura de excelencia).
Te hablo a ti que te gusta imaginar los escenarios deseados en tu vida, que logras ver cada detalle en esa visualización creativa, para luego ser interrumpido por alguien que te ve en trance y dice: -hey, planeta Tierra comunicándose contigo, ¿a dónde fuiste? Te pasmaste como la compu.
¿Te ha ocurrido algo así? ¿Has soñado despierto? Me pasa seguido, una de esas tantas veces, no solamente lo soñé, también puse acción de por medio para ser proactivo, es decir, hacer que los sucesos ocurran.
Fue la década pasada, cuando aún vivía con mis padres transitaba seguido por un camino que inexorablemente atravesaba por un sendero donde se erguía orgullosa una edificación de importante empresa mecatrónica trasnacional.
Cuando atravesábamos por tal camino y veía el edificio de tal empresa, en varias ocasiones me fugué del momento presente, me fui hacia un instante de realidad alterna, en mi imaginación, donde me vi a mí mismo dando un programa de capacitación para el personal de dicha organización.
Contar con visión, te pone en condición, ten cuidado con lo que sueñas, se te puede hacer realidad, es decir, ten cuidado que tus sueños no se conviertan luego en pesadillas.
Porque en la presente década ocurrió.
A nombre de una agencia consultora, con la que colaboro eventualmente, fui convocado para dar varias tutorías en materia de competencias transversales, es decir, habilidades útiles en cualquier actividad profesional, tales como la Comunicación, Inteligencia Emocional y Manejo de Conflictos.
La mala noticia es que un día en que estaba asignado para dar una de estas intervenciones, andaba fuertemente agripado, me sentía francamente mal, andaba en malas condiciones.
¡Contar con visión, te pone en condición! Me sobrepuse, recordé la visión que tuviera en la década pasada, junto con el actual compromiso para llevar desarrollo al personal de esta organización, así fue que por 9 horas me concentré para entregar el servicio.
Terminé exhausto, satisfecho de cumplir no solamente con la misión, sino convencido del poder de una visión, me encontraba realizando lo que en la década pasada solamente en sueños pude ver, con, a pesar de y en contra de mi mala condición de salud, por una razón:
Contar con visión, te pone en condición.
Al menos mientras ejecutas la visión, porque vaya pesada recuperación que tuve que vivir para reponerme.
Te pregunto, ¿cuál es tu visión? Ya sea en área profesional, intelectual, diversión, espiritual, salud, económica, afectiva o social ¿podrías incluso expresarla o la tienes ya por escrito, la has visualizado?
Te desafío a registrar tu visión, así como también a ponerle acción. Basado en las aportaciones del autor Brian Tracy en su libro Por qué caminar, cuando puedes volar y de Stephen Covey en su obra El Octavo Hábito, hay 3 acciones concretas para configurar tu visión:
a) Dibújala
b) Escríbela
c) Trabájala
Elige los escenarios de vida más relevantes para tus ámbitos de existencia prioritarios y dibújalos, redáctalos y luego ponles acción planeada, de esta manera los estarás atrayendo.
Porque...
¡Contar con visión te pone en condición!
Te hablo a ti que te gusta imaginar los escenarios deseados en tu vida, que logras ver cada detalle en esa visualización creativa, para luego ser interrumpido por alguien que te ve en trance y dice: -hey, planeta Tierra comunicándose contigo, ¿a dónde fuiste? Te pasmaste como la compu.
¿Te ha ocurrido algo así? ¿Has soñado despierto? Me pasa seguido, una de esas tantas veces, no solamente lo soñé, también puse acción de por medio para ser proactivo, es decir, hacer que los sucesos ocurran.
Fue la década pasada, cuando aún vivía con mis padres transitaba seguido por un camino que inexorablemente atravesaba por un sendero donde se erguía orgullosa una edificación de importante empresa mecatrónica trasnacional.
Cuando atravesábamos por tal camino y veía el edificio de tal empresa, en varias ocasiones me fugué del momento presente, me fui hacia un instante de realidad alterna, en mi imaginación, donde me vi a mí mismo dando un programa de capacitación para el personal de dicha organización.
Contar con visión, te pone en condición, ten cuidado con lo que sueñas, se te puede hacer realidad, es decir, ten cuidado que tus sueños no se conviertan luego en pesadillas.
Porque en la presente década ocurrió.
A nombre de una agencia consultora, con la que colaboro eventualmente, fui convocado para dar varias tutorías en materia de competencias transversales, es decir, habilidades útiles en cualquier actividad profesional, tales como la Comunicación, Inteligencia Emocional y Manejo de Conflictos.
La mala noticia es que un día en que estaba asignado para dar una de estas intervenciones, andaba fuertemente agripado, me sentía francamente mal, andaba en malas condiciones.
¡Contar con visión, te pone en condición! Me sobrepuse, recordé la visión que tuviera en la década pasada, junto con el actual compromiso para llevar desarrollo al personal de esta organización, así fue que por 9 horas me concentré para entregar el servicio.
Terminé exhausto, satisfecho de cumplir no solamente con la misión, sino convencido del poder de una visión, me encontraba realizando lo que en la década pasada solamente en sueños pude ver, con, a pesar de y en contra de mi mala condición de salud, por una razón:
Contar con visión, te pone en condición.
Al menos mientras ejecutas la visión, porque vaya pesada recuperación que tuve que vivir para reponerme.
Te pregunto, ¿cuál es tu visión? Ya sea en área profesional, intelectual, diversión, espiritual, salud, económica, afectiva o social ¿podrías incluso expresarla o la tienes ya por escrito, la has visualizado?
Te desafío a registrar tu visión, así como también a ponerle acción. Basado en las aportaciones del autor Brian Tracy en su libro Por qué caminar, cuando puedes volar y de Stephen Covey en su obra El Octavo Hábito, hay 3 acciones concretas para configurar tu visión:
a) Dibújala
b) Escríbela
c) Trabájala
Elige los escenarios de vida más relevantes para tus ámbitos de existencia prioritarios y dibújalos, redáctalos y luego ponles acción planeada, de esta manera los estarás atrayendo.
Porque...
¡Contar con visión te pone en condición!
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