Matar el tiempo es suicidio

Quien gestiona su tiempo, gestiona su vida, nuestras horas son nuestro patrimonio de riqueza, tiempo es vida. 

Reflexionemos la próxima ocasión que nos escuchemos pensar o decir que vamos a matar el tiempo, esto sería quitarnos vida.

En futbol, un segundo dentro del área chica en una descolgada con pase al hueco entre el delantero y el portero, es un mundo de tiempo, quien mejor lo aproveche, triunfa.

Con salud, armonía contextual y conciencia del presente podemos construir belleza para el instante aquí y ahora.

Somos afortunados de contar con libros electrónicos a nuestro alcance en el dispositivo móvil, podemos cultivarnos al aguardar en una fila, en salas de espera, en tránsito lento con audios, ya no hay excusas, hacer nada es opcional invariablemente.

  

¿Tienes palabra profesional?

¿Recuerdas la última ocasión que dijiste o escuchaste... ¡Te lo juro!?  Cuando somos nuestra palabra, sobra andar reiterando que sí lo haremos.  Y si eres un profesionista titulado, entregaste tu palabra para brindar de la mejor manera posible tu servicio.  

Sin ser profesionistas, existe eso que llamamos, nuestra labor, o bien el oficio al que nos dedicamos, esta actividad por la cual entregamos a otros algún beneficio, sea con un producto o con servicios.

En esta labor es requerida nuestra palabra profesional, pues la expectativa es que demos lo mejor que esté en nuestras posibilidades para entregar nuestro talento en beneficio del la evolución propia y de los otros.

Ser nuestra palabra corresponde a una responsabilidad con uno mismo, con la congruencia, con honrar y cultivar lo que Sthephen Covey llama salario emocional.  

Hay otros que esperan que les entreguemos lo mejor de nuestros dones, en el ámbito profesional, se espera lo mejor por nuestra labor.

Esto es, en mis vínculos con otros, yo deposito abonos cuando soy verdad en lo que asevero con relación a mis actos. 

Las promesas cumplidas, las acciones consecuentes con lo que uno dijo u ofreció en su servicio, esto hace depósitos en nuestra cuenta con la certidumbre y confianza que los otros tengan sobre uno mismo y su servicio.

Cuando falto a mi palabra, por olvido, por omisión, por preferir otras acciones que fueron prioritarias, faltando así a las promesas, incumpliendo lo que aseveré para con otros,  entonces pongo en riesgo mi credibilidad, mi palabra, mi labor.

Yo soy mi palabra. Si digo que haré algo, o si hago una promesa, o si enuncio un compromiso hacia alguien, sucederá, lo único que podría impedirlo: salud, familia, siniestro u oportunidad de un servicio superior.

¡Mi palabra está en prenda! ¡Y voy por ella!

Ni propósitos, ni deseos: proyecto de vida

Un propósito es un objetivo que se pretende conseguir según la Real Academia de la Lengua Española. Y tal significado me es insuficiente para tomar acción comprometida.

Los deseos tienen la virtud de que en ocasiones se acompañan de visualizaciones y decretos verbales. Cumplen una función importante que completa lo más contundente: ACCIÓN.

La fórmula para realizar los cambios es ACCIÓN. Por eso te desafío a desarrollar tu Proyecto de Vida, de esa manera contarás con la brújula concreta que te guíe las decisiones y prioridades de cada día.

Dentro de un ambiente amistoso, con herramientas comprobadas por autores como:

Brian Tracy (escritor canadiense sobre Desarrollo Personal)

Stephen Covey (ícono del Desarrollo Organizacional mediante la realización de las personas)

Anthony Robbins (modelo de procesos formativos de alto impacto)

Sergio Fernández (Fundador del Instituto Pensamiento Positivo en España) 

y más autores en los que me basé para diseñar, construir, implementar y actualizar de modo permanente un producto formativo valioso, tu taller Proyecto de Vida.

Pongamos a funcionar nuestro tiempo-vida para generar los anhelos desde la acción, la revisión y ajustes.

Aprovechemos la oportunidad para hacer una revisión existencial a fin de redirigir el camino personal en cada una uno de los ámbitos de la vida.

¿Es relevante la filantropía y el bienestar social en tu proyecto de vida?

Ayudar a otros es símbolo de que estás en condiciones de aportar, por cierto, tal contribución ¿prefieres hacerla con dinero o con tu persona?

El pasado domingo mi hermana presentó un proyecto frente al Monumento a la Revolución en la CD MX, donde un centenar de personas con discapacidad de diferentes índoles, bailaron una coreografía entrenada desde hace más de cuatro meses.

Como su hermano, me siento orgulloso de su pasión por la danza, ella fue la coreógrafa que armó prácticamente el evento, donde no hubo dinero de por medio, remuneración monetaria para ella no hubo, solamente su persona.

Tal es el desafío del área social en nuestras vidas, entregar una donación en dinero es algo que muchos estilan, entregar tu persona, tu presencia, tu compañía en un proyecto compartido por varios meses, esto es algo que con mucha categoría mi hermana cristalizó con su compañía Expreso Danza Express.

Según el autor Michael Roach en su libro El Karma del Amor, tales actos muestran al universo una contribución valiosa y tales actos son semillas que germinarán en dicha, amor, abundancia para quienes lo hacen.

¿Cuál es tu contribución personal para el bienestar social? 

 

Vitalidad es vivir con intención

"No es que por tener gusto y entusiasmo seremos esclavos de caprichos y hedonismo, pero tampoco dejemos de tenerlos como una guía de nuestra vitalidad" Luis Pescetti

¿Cómo defines vitalidad? Estamos vivos y ya es buena noticia, sin embargo, estar con salud, 'a las vivas', con vigor y actitud entusiasta, podría vincularse con una vida radiante, lograda, estupenda.

Vitalidad es un término que se vincula con el gusto por nuestra existencia, así como con el entusiasmo por su construcción. 

Si cuentas con actitud para interpretar el presente de modo alentador y visualizas escenarios deseables en tu vida, realizando acciones para experimentarlos, entonces eres una persona VITAL.

Una persona vital es la que crece, que cambia, que está en proceso de maduración.  ¿Qué es la vitalidad? Según los autores Casares y Siliceo, podemos definirla como la energía y motivación que nos mantiene no sólo vivos, sino en constante crecimiento, desarrollo y actualización de nustras potencialidades.

Lo que se requiere para evolucionar es QUERER.  Contar con la INTENCIÓN para disfrutar la existencia en su momento presente y saborear el esfuerzo de construcción de nuestros escenarios ulteriores.

Vida con intención, aquí la clave para ser... ¡VITAL!

Los afectos nos afectan

"Para mantener felicidad en la relación, debe haber conflicto, así elevar el vínculo y sus integrantes" David Schnarch.

El conflicto nos da ocasión para aplicar la herramienta DIMECAA, la cual es una mediadora para controlar el modo en que nos afectan los vínculos y desarrollarlos.

Cada vínculo es un afecto, en mayor o menor grado nos afecta, así que podemos incrementar nuestra dicha en tal relación si conversamos acerca de lo que nos gusta y lo que nos gustaría fuera distinto en la misma.

Para tal fin, aplica la herramienta DIMECAA.

D  omina qué ocurre y las circunstancias.

I    nvita a conversar a esa persona.

M  uestra afecto, comienza en positivo.

E  xpresa los hechos sin juicios o quejas.

C  analiza respuestas en soluciones.

A  cordar soluciones y consecuencias.

A  ccionar soluciones y consecuencias.

Salud y economía

El común denominador entre la salud y tu forma de administrar tus recursos financieros es... ¡ENERGÍA!

¿Cómo te sientes cuando andas sin deudas? ¿Qué beneficios a la salud hay por atender el trinomio descanso, alimentación y deporte?

Reflexionemos sobre el vínculo entre economía y salud. Como con cada área de la vida, lo que ocurre en una, le afecta a la otra. 

Es como el cuerpo humano, cada sistema, sus órganos, sus células, conforman un todo funcional. Así también con cada área de la vida, en concreto, ¿qué notas en tu salud cuando andas por la vida con tarjetas de crédito sin saldo deudor, con ahorros de inversión y con solvencia?

¡Exacto! Paz, tranquilidad, relajación. Que te permite enfoque, planeación y aprovechamiento de los recursos existentes para caminar con tu ritmo, hacia tus escenarios deseados.

Para reflexionar y tomar acción con relación a las áreas de la salud y la economía, contesta en hojas de tu Agenda Andragógica (cuaderno de misión personal)  las siguientes preguntas:

SALUD

1. ¿Cuántas horas me funcionan para dormir y qué hago para respetarlas?

2. ¿Qué hago para obtener los mejores beneficios para mi alimentación?

3. ¿Cuáles deportes integro a mi vida y con qué frecuencia?

ECONOMÍA

1. ¿Qué hago para contribuir a mi abundancia económica?

2. ¿Cómo estoy abasteciendo de recursos financieros a las siguientes experiencias que deseo vivir?

3. ¿Qué realizo actualmente para controlar mi uso del dinero?

¡Listo! Transforma tus respuestas a estas preguntas en acciones concretas, de esta manera, tendrás mayor dominio sobre el uso de tu tiempo-vida en estos importantes ámbitos de la existencia: la salud y la economía.